Un Eibar de ensueño golea y se mantiene sexto en la clasificación

Un Eibar de ensueño que rompe récords y asombra a propios y extraños ha logrado la goleada más abultada de su historia en Primera División (junto con el 0-4 en Sevilla hace dos semanas) ante un Granada que se ha visto desarbolado por la impresionante pegada de los armeros.

El 5-1 ha sido una recompensa inemejorable para los 4.215 espectadores que se han acercado a Ipurua y han disfrutado de un espectáculo de juego y goles que les ha dejado felices y boquiabiertos. 

El encuentro comenzó trabado. El Granada jugaba sus armas, blindaba su área e intentaba taponar las bandas sabedor de que ése es el principal recurso ofensivo del equipo de Mendilibar.

La primera mitad parecía caminar hacia el empate a cero cuando Keko Gontán sacó el abrelatas y abrió la defensa granadina en dos jugadas que encauzaron el partido para su equipo. En el miinuto 35, su pase a Inui desde la derecha fue rematado de forma impecable por el japonés, que entraba por el segundo palo. En el 37, Enrich tocó la suficiente el balón para superar a Andrés a pase de Keko desde la línea de fondo.

Pese a todas las precauciones del Granada, los goles llegaban de la forma que parecía más previsible: por las bandas.

El Eibar tenía muy bien controlado el encuentro en la segunda mitad pero su primer (y único) error defensivo sirvió a El Arabi para reducir distancias a portería vacía en el minuto 65. La incertidumbre se apoderó de Ipurua.

Sin embargo, cuando las cosas van de cara suceden cosas como que solo pasen tres minutos para que el equipo vuelva a adelantarse en el marcador. Borja sirvió para Sergi Enrich y el balear marcó en el minuto 68 su segundo tanto de la noche con un disparo raso ajustado al palo desde el borde del área.

El tanto acabó definitivamente con la resistencia del Granada y dio paso a un Eibar desatado que buscó con avidez la portería del Granada. En el minuto 73, Borja Bastón recogió el rechace tras un disparo de Keko y anotó de disparo duro y raso. Cinco minutos después, el propio Borja (que suma ya doce tantos en Liga) culminó casi a portería vacía una gran jugada individual de Sergi Enrich por la derecha, con caño incluido.

Los últimos minutos fueron de disfrute para los aficionados que saborearon la victoria de su equipo, que ha sumado 12 puntos de 12 posibles en las últimas jornadas y avanza a pasos agigantados hacia el objetivo de la permanencia.