La sala de prensa del Estadio de Ipurua ha acogido en la mañana del miércoles la comparecencia de César Palacios, director deportivo de la SD Eibar, quien ha hecho balance del recién clausurado mercado de fichajes del fútbol español. Con diez incorporaciones y once salidas, el director deportivo ha atendido a las preguntas de los medios de comunicación allí presentes, asegurando que «el primer cambio importante ha sido nuestra casa, Areitio» y el salto de calidad, tanto en el presente como en el futuro, que esta instalación otorga al club.
También ha destacado que la posibilidad de trabajar desde el pasado curso con el nuevo cuerpo técnico ha permitido «tener todo resuelto con semanas de antelación». Además, ha incidido en que el objetivo del equipo no puede ser otro que ser fiel a la identidad del Eibar desde la «realidad» de la competitividad que rodea al club. «Nuestro objetivo es ser siempre un equipo que transmita, del que la afición se sienta orgullosa. Eso es Eibar. Ponernos límites o metas sería asumir una responsabilidad que no corresponde».
Satisfacción con el mercado
«La noche del lunes fue tranquila con el mercado porque pudimos cumplir los objetivos marcados con semanas de antelación. Nos hemos ilusionado con cada fichaje. Ha sido consensuado con el cuerpo técnico y en casi todos los casos han sido los jugadores que teníamos en mente desde el primer momento. Ha habido situaciones que hemos luchado y no ha podido ser, pero eso es el mercado. Teníamos muy claro dónde, cómo y quienes y eso nos ha permitido trabajar con fuerza desde el principio y hacerlo con tiempo. Además, hay que dar valor a tener a toda la plantilla inscrita con todas las fuerzas al servicio del equipo desde el inicio».
Sentimiento de pertenencia y valor exterior
«Sobre todo buscamos sentimiento y conocimiento. No todos salen de la cantera, pero conocer todo lo que rodea al Eibar hace sentirnos más fuertes y facilita su adaptación. Todos los que llegan lo tienen que sentir y cuanto mayor sea el sentimiento más fuerte nos hace como equipos. El fútbol profesional tiene máxima exigencia competitiva y hay que tener el nivel que requiere la categoría. Encima estamos rodeados de grandes estructuras por todos lados y no es fácil, pero peleamos por intentar jugadores de casa, de la cantera, que van llegando y jugadores que conozcan lo que nos rodea. Es una línea a seguir y estamos contentos con el grupo humano que tenemos».
Incorporaciones con efecto inmediato
«Cada mercado es distinto. A veces la planificación de una posición concreta lleva más tiempo y apuestas por esperar. Fue importante que por desgracia tuviéramos que cambiar de técnico, pero nos permitió planificar con tiempo. Desgraciamente no jugamos playoff como había sido estos años y con eso también adelantas. Empezar con el mayor número de jugadores fue importante y a partir de ahí debemos competir desde agosto».
Mercado femenino
«El primer cambio importante fue la incorporación de Rocío a la secretaría técnica. Como club quisimos que Jordi y Yeray siguieran, pero ellos consideraron que había acabado un ciclo. Y ya con Rocío nos pusimos a trabajar en ese nuevo proyecto. Mantener un equipo en Primera División femenina también tiene exigencias y el club hace un esfuerzo enorme por hacer buenas plantillas. Ese ha sido su trabajo. Han sido doce incorporaciones más las que suben del filial. Se ha hecho un buen trabajo y vamos a competir. El objetivo que nos marcamos es intentar estar en Primera División el año que viene, que no es poco, es difícil y ambicioso».
Salida de Antonio Puertas
«Cuando acaba la temporada, Antonio nos transmite que quiere volver a casa por temas personales. Para nosotros era un jugador importante, pero también creímos que si se daba una situación, llámalo traspaso o como quieras, porque tenemos derechos del jugador, creíamos que habría jugadores que podrían tener más protagonismo. Él transmitió que quería cambiar y la situación del Albacete fue beneficiosa para todos».
La cantera como línea estratégica
«Es una de las líneas que el club tiene en mente. Está haciendo un esfuerzo enorme en tener toda la estructura y se está demostrando con hechos y resultados. Tenemos un equipo en Segunda RFEF, otro en Tercera RFEF, el juvenil en División de Honor, cadetes, infantiles, y todos están dando muy buenos resultados. En el fútbol profesional la exigencia es máxima y no todos los chicos llegan, ojalá. Hemos cedido seis chicos a Primera RFEF buscando que sea un test claro para ellos. Estamos muy ilusionados con que puedan ir llegando en un futuro. Sabemos de la dificultad y la responsabilidad, pero tienen que tener la ilusión porque la puerta está ahí y es real».
Objetivo del primer equipo masculino
«Creo que hay que ser realistas en el sentido de que es la quita temporada en Segunda División. No somos ese Eibar que bajó de Primera y era máximo favorito con fuerza económica grande. Tenemos menos fuerza en muchos aspectos, es una realidad, y hay que ser realista en los objetivos. La competitividad es un valor del club y eso te permite pensar en estar bien situado. Me encantaría decirte, tenemos que estar en Primera, subir, etc. Pero no. Nuestro objetivo es ser siempre un equipo que transmita, del que la afición se sienta orgullosa. Eso es Eibar. Ponernos límites o metas sería meternos una responsabilidad que no corresponde. Debemos sentirnos con fuerza y orgullosos de la Ciudad Deportiva, de Ipurua que es un estadio precioso, y de competir con lo que tenemos, sabiendo que somos una ciudad de 27.000 personas. Y viendo con todos los que competimos, la dificultad es máxima y estar en Segunda División es la base de que el club sobreviva en muchos aspectos. El objetivo es volver a estar en Segunda División el año que viene porque todo depende de eso y a partir de ahí, competir y ya veremos. Vamos a comprar todos los boletos posibles para competir cada entrenamiento y cada partido como lo estamos demostrando. El objetivo que nos marcamos es ser Eibar».
Recuperación de Mada
«Es un chico extraordinario. La recuperación está siendo buenísima y él lo ha dado todo siempre con una sonrisa. Cuando ves que llegan al primer equipo sientes satisfacción e ilusión. No nos podemos marcar un plazo con su vuelta, pero para mediados de septiembre puede volver a entrar con el equipo. Va muy bien e incluso podríamos pensar que está ya, pero hasta que no lleguen los 8 o 9 meses de recuperación no podemos pensar en competir. No queremos marcarnos metas y hay que tener la tranquilidad suficiente para que cuando vuelva esté con confianza y seguridad».